Vamos a jugar tu y yo a la felicidad; pero para ello empieza por enséñame a cuidar los bosques, a disfrutar un vaso de agua lo mismo que un dulce manjar, dame instrucciones para aprender a ser feliz hasta en mis fracasos, regálame el secreto de las bendiciones para bendecir a quienes lleguen a mi, déjame aprender a querer con ganas y sin miedo desde un mosquito, hasta cada uno de los mas extraños seres de este planeta.
Déjame imitarte en las buenas cosas que haces, déjame ser como tu; humilde, inteligente, comprometida.
Si jugamos no será necesario que me enseñes a fumar, ni a tomar, mañana seré un hombre sin sueños.
Cuando lleguen los problemas no me enseñes a gritar, tampoco a mentir, mañana dañare y lastimare corazones.
No me enseñes a ser mediocre, ni conformista, mañana no tendré un mañana, no habrá futuro para este juego.
Enséñame a Querer y amar sin miedo a dejar de lado mi orgullo de hombre, enséñame a jugar a ser honesto, tierno y cada día un mejor humano. Juguemos ese hermoso juego de la verdad sin maltratarnos reconociendo en cada uno de nosotros seres diferentes e imperfectos, pero dueños del más grandioso de los tesoros nuestra felicidad.
ES EL MAS GRANDIOSO DE LOS SUEÑOS... LA FELICIDAD....Y TU LO PLASMAS CON TAN GRANDIOSAS PALABRAS QUE NO ES DIFICIL DE ALCANZAR.....
ResponderEliminarMi estimado Alexander el dicho dice: " Del corazon habla la boca", sin duda tus sentimientos son hermosos, y de tu corazon han hablado tus manos, ser felices es algo que quisieramos todos, un besito para ti con todo mi cariño y aprecio.
ResponderEliminarRosita Caro